Felicidad laboral ¿Utopía o realidad?
El concepto de felicidad laboral, ya no es una moda y mucho menos una utopía en el mundo empresarial. En poco tiempo, dejará de ser un valor agregado o un plus que brindan las organizaciones a los miembros de su equipo de trabajo. Esto ha sido el resultado de un mundo que pide a gritos cambios radicales que, nos permitan vivir una vida de manera diferente.
Partiendo desde el concepto general de la felicidad, se han hecho muchos estudios, de los cuales, el más destacado podría ser el realizado por la Universidad de Harvard. El cual contó con una inversión de más de U$20 millones de dólares, por fue realizado por un espacio de 75 años. Los resultados de dicha investigación fueron publicados en el 2012, por parte del psiquiatra George Vaillant, quien había dirigido dicha investigación entre 1972 hasta 2004.
Entrando en contexto, pudo decirte que, los resultados del estudio antes mencionado, están bastante alejados de lo que a veces creemos. Por ejemplo, ligar a la felicidad con el poder, riqueza, excesos, o vidas perfectas; las cuales aprovecho para decirte que, no existen. Lo que, si demostró el informe de Vaillant, es que la felicidad, está ligada al amor, y recomienda que se coloque por encima de todo, para permitir su preservación y valoración. Otra conclusión apunta a la familia y la amistad, demostrando que son mucho más valiosas que el dinero.
¿Cuáles son los beneficios generales de la felicidad laboral?
Enfocando lo anterior hacia las organizaciones, es la oportunidad más enorme e innovadora de llevar a tu empresa a otro nivel. Esto debe ir de la mano de los miembros del equipo de trabajo, con coherencia, estrategia, cultura corporativa, inspiración, lealtad, admiración interna y externa. Hacerlo, traerá mejores resultados desde el aspecto financiero, de ventas, confianza del consumidor y fidelización de los clientes, tanto internos, como externos.
Con base en lo expuesto previamente, te voy a dar 5 puntos de atención, para que tu área de un vuelco a la realidad. Esperando que comprendas que, no estamos en una era de cambios, sino en un cambio de era:
Primera actividad de felicidad laboral – Desarrolla una gerencia de la felicidad:
Pero real, no solo de palabras, liderada por una marca personal corporativa, llena de empatía, carisma, y pasión por su trabajo. Permitiendo a esta persona y a tu organización, alejar a los motivadores, años luz de distancia. Innova dejando de hacer reclutamiento, para empezar a invitar amigos, que potencien el crecimiento de la organización. Logrando tocar la vida de sus compañeros de trabajo, proveedores, clientes, etc.; creando un gran impacto social.
En este sentido las compañías deben empezar a variar sus actividades de final de año o convenciones. Por actividades de mayor impacto, que de verdad dejen huella y permanezcan en el tiempo, convirtiéndose en tu cultura corporativa. Finalmente, invita a cambiar esa creencia errónea de ligar la felicidad, de manera directamente proporcional a las cajas de alcohol que hayan comprado.
Segundo consejo: Crea un equipo de investigación:
Pero no para cosas banales, por el contrario, para saber que les gusta a tus funcionarios. Esto te permitirá saber que los apasiona, que soñaron ser cuando niños, que los transporta a otra galaxia, y lo más importante, toma acciones. Las cuales deben estar alineadas entre el objetivo de la compañía y lo antes mencionado. Esta es la mejor manera de lograr que tus empleados vean el trabajo como una gloriosa oportunidad y no un castigo divino. En esta etapa del proyecto, podrás obtener como valor agregado, la mejor materia prima del mundo para establecer una estrategia de Employee Advocacy.
Tercera actividad estratégica: Olvídate de los horarios:
Estar más horas en la organización no es sinónimo de competitividad o mayor compromiso, por el contrario, puede ser algo totalmente contraproducente. Convirtiéndose en un generador de accidentes laborales, como efecto del cada vez más habitual Burnout o el fatal Karoshi. Así mismo, bajos rendimientos por problemas en la familia, debido al alejamiento del ejecutivo de sus prioridades verdaderas, por mencionar tan solo un par. Mejor haz planes que permitan el descanso, la interacción para desarrollo de mejores ideas de producción, logística, comercialización, felicidad laboral, clubes familiares etc. Básate en indicadores y no en máquinas de registro, notaras el cambio y veras, como menos es mucho más.
Cuarto consejo de felicidad laboral – Ten la puerta siempre abierta:
Los ejecutivos de puerta cerrada son tan eficientes, como sus computadoras apagadas. Entonces, abre las puertas de tu oficina, liquida de una vez por todas al prefijo “doctor”; nocivo, enfermizo y con complejo de inferioridad. Hazte un genio de la administración del tiempo, en la transmisión de conocimiento, sentido de ayuda a los demás. Así mismo, inspira a tu equipo, y ellos ayudaran a replicar lo bello que haces; evitando tener que cargarte a caballito a toda la organización. Esto te aseguro que se volverá un secreto a gritos y tu organización se convertirá en un Employer Branding, sin haberte dado cuenta.
Quinta y última actividad – Invita a la familia a ser tu aliada estratégica:
No existe aliado estratégico, más grande en el 95% de los casos que la familia. Por eso invítalos a ser parte de esta gerencia de la felicidad; que se inscriban en programas de integración, celebraciones, trabajo colaborativo externo, etc. Construye actividades que permitan el conocimiento de la actividad tan importante y valorada que desarrollan sus padres o parejas en la organización. Complementa un poco este consejo con el numeral 3 y permite alguna salida más temprana, para que puedan ir a una cena, un cine, un cumpleaños o grado educativo.
Finalmente quiero que entiendas que, si deseas los mejores clientes del mundo, deberás primero tener los mejores empleados de la tierra. Valora y paga lo que realmente se merecen, dales el trato que desean tener; de esta forma, tendrás un marketing social empresarial autentico y arrasador. Como resultado final, les habrás llevado al clímax de la mano de la felicidad laboral.
