¿Tiene realmente una importancia preponderante?
Decir que somos los mejores es muy fácil, donde está realmente el reto, es en demostrarlo y mantenerse en el transcurso de los tiempos. Con base en lo anterior quiero decirte que, la propuesta de valor de tu marca personal, se resume a aquello que te hace casi único. Es decir, lo que te distingue de la competencia, por ser lo mejor que hace tu empresa. Así mismo, ofrecer la confianza para poder resolver problemas o necesidades, por eso debe estar centrada en tus clientes.
Un factor de éxito y conexión que no deberías olvidar en su construcción, debería que contenga valores funcionales y emocionales. Ya que estos aporten un beneficio adicional a tu cliente, redundando en una conexión mayor con vos.
Propuesta de valor y marca personal ¿Cómo entenderlo de una manera más simple?
Entrando en contexto, quiero compartirte un ejemplo que planteo a los chicos de las universidades cuando recién se están graduando de sus pregrados o posgrados. Básicamente, les invito a ver a su alrededor, y que se den cuenta de que, los diplomas que tienen en sus manos son casi idénticos. Tienen la misma dimensión, mismos logos del ente académico, misma resolución de la entidad que avala, las mismas firmas de los directivos, diseño, peso, etc. Lo único que cambia es los nombres que allí están, por eso es que tu marca personal debe hacer la diferencia.
Ese ejemplo tan básico y fácil de entender, es con lo que nos enfrentamos a diario; en un mercado cada vez más competido y competitivo. Más exigente, más personalizado, de sentimientos y emociones, que no busca tan solo suplir necesidades, sino que requiere un valor agregado real. Con base en lo anterior quiero llevarte por una guía muy básica de cómo podrías crear tu propuesta de valor.
Primero – ¡Transmite más que palabras…!:
Vale la pena anotar que, la construcción de esta propuesta de valor para tu marca personal, debe ir más allá de una construcción gramatical que suene muy lindo. Debe tener toda una conexión, pero al mismo tiempo un compromiso que se puede cumplir desde el primer día y a lo largo del tiempo. De no ser así, en la primera actividad, reto, o contacto con tu cliente, verán que estás mintiendo, con las consecuencias que eso puede traer. Demuestra coherencia y la sinergia con la misma, con el único objetivo de no perder la confianza y la conexión de tu compañía o emprendimiento. Lo anterior te permitirá crecer empresarialmente, en cualquier actividad personal, profesional o corporativa que inicies en tu vida.
Analiza por un instante que, a Coca Cola, ya no le basta con decir que es la chispa de la vida, como lo hacía hace 30 años. Si no que ahora desarrolla todo un Storytelling, a partir de la felicidad, la unión familiar, la ayuda a los demás y los valores. En este orden de ideas no olvides nunca que, hoy juega un papel preponderante, todo aquello que hagas por el mundo. Situación cada vez más afianzada gracias a los Millennials, y acá es donde realmente estará el reto para tu marca personal, cómo para las organizaciones.
¿Cómo gestionar esta primera etapa de tu propuesta de valor para tu marca personal?
Dicho lo anterior, quiero empezar por recomendarte gestionar la búsqueda de tu esencia y sentido de vida. Que, desde mi enfoque de construcción de marca personal, se fundamenta en el MarketCoach donde te potenciarás bajo la matriz de los seis campos. Aparte de ayudarte a conocerte cada vez mejor, también te dará la oportunidad de hacer cierres de ciclos del pasado. De igual forma, refrescar logros obtenidos en tu vida y que a veces dejamos de lado. Perdiendo de vista sucesos que le darían fortaleza y combustible al trayecto que estamos trasegando. Entonces empieza el recorrido por los campos que la componen, como son la matriz de la relación con vos mismo, y con tu familia. Complementa y cierra con las matrices de relación con el entorno, el trabajo, la pareja y la sexualidad; fundamentales para una vida en armonía.
Es fundamental hacerlo de manera honesta, concienzuda y profunda el proceso anterior, ya que esto te permitirá, saber de qué estás hecho, que te apasiona. Lo que te permitirá que dicha propuesta de valor de tu marca personal, tenga claridad, sea objetiva y fácil de encontrar. Ten presente de igual forma, que mucha de esta información provendrá de la construcción que hayas desarrollado en tu misión, visión y valores corporativos.
Encuentra en este vídeo una mini lista de reproducción con los 3 pasos básicos para que puedas construir tu marca personal.
Segundo – Plasma lo anterior en una proposición:
Para tal efecto debes inicialmente en definir un título acerca de lo que hace tu marca personal o emprendimiento, en un máximo de dos frases. En este aspecto, debes ser muy descriptivo, apasionado y seguro, obvio sin entrar en arrogancia o en promesas incumplibles. Esto dará la seguridad a tu cliente del conocimiento de lo que haces y cómo lo haces, factores fundamentales en la decisión de compra.
Ahora podrías venir a una suerte de subtitulo con dos o tres líneas más. Donde detalles brevemente y de manera concisa lo que ofreces, y a quién se lo ofreces. Una pieza adicional que te puede servir en este aspecto de construcción debería ser el para qué, de lo que estas construyendo, ofertando o comercializando. En este aspecto te sería de gran ayuda los Pain Points que has definido para tu Buyer Persona, en tu plan de inbound marketing. Ten presente que deben ser cuantitativos (precio, velocidad, tiempos de entrega); pero también cualitativos (innovación, acabados, diseño, bienestar a la salud).
Tercero – ¡Cumple a diario Tu Propuesta de Valor de tu Marca Personal!
Aunque suene obvio, no lo es tan así y ese ha sido el gran error de muchas organizaciones que, vos no podés darte el lujo de repetir. Por eso procura en lo que este a tu alcance dar el cumplimiento a la misma. En ese orden de ideas. Busca esos detonantes que te hagan dar esa milla extra siempre, como podrían ser el carácter y la disciplina. Complementa con una pequeña dosis de terquedad, locura y toda la pasión del mundo. Que te van a hacer diferente y va a ser el éxito de la propuesta de valor de tu marca personal.
No te confundas, ni te dejes engañar, tu propuesta de valor, nunca va a estar centrada en los títulos universitarios que pudieras obtener. Tu diferencial no está en pregrados, especializaciones, maestrías, doctorados, etc., porqué sino haces nada con el conocimiento, este se esfuma, como aguante entre las manos. Deja esto solo para las universidades obsoletas, que tan solo se centran su esfuerzo en seguir produciendo diplomas andantes, y coleccionando acreditaciones de “altísima calidad”.
¿Propuesta de valor es lo mismo que eslogan?:
Ten presente siempre que un eslogan es totalmente diferente a una propuesta de valor, ya que es un error que se comete habitualmente. El primero es una frase que genera recordación, y apuesta esencialmente al branding. Ya que lo único que busca es llamar la atención y quedarse en la memoria del cliente. Aunque de entrada esto suena genial, ten la seguridad que lo antes expuesto, no asegura que generes una venta y menos la fidelización del cliente. Piensa por un instante cuantas marcas pueden venir a tu mente, y luego compara en cuantas de ellas comprarías; ahí comprobaras la veracidad del planteamiento.
La propuesta de valor aporta obviamente al branding, pero también suma al crecimiento y respeto ganado por el buen nombre de la marca. Es toda una integralidad; pero si hablamos de personal branding, es mucho más importante, que para cualquier organización. No en vano, tu marca personal, será el sello de calidad que le dará credibilidad a tu proyecto, emprendimiento o gestión dentro de una organización. Lo anterior si genera fidelización, recomendación, crecimiento ventas, proyección, entre muchas otras ventajas.
La propuesta de valor de mi marca personal:
“Te ayudo a construir la película de tu vida, de la mano de tu marca personal. Apoyado por la técnica holística de entrenamiento llamada MarketCoach, dejaras de ser creativo, para convertirte en innovador; pasando de la motivación a la inspiración. Buscando que, todo aquello que sueñas y por lo que luchas a diario, deje de ser de acciones y se convierta en tu mayor proyecto. Como acelerador tendrás la disciplina, la definición de prioridades, el liderazgo; y algo que es fundamental, ¡Siempre disfrutaras de un acompañamiento y guía constante!”.