¿Por qué es tan importante que tu marca personal tenga definidas sus prioridades?
Hay una frase que recita que, “Si no sabes para dónde vas, no sabrás si estas en el camino correcto”. La misma te debe sonar de cajón o capaz que, debes estar cansado de oírla e intentar comprender por qué no dejas de escucharla. La respuesta es fácil, debido a que siempre debes tener un objetivo, que te sirva de guía y motor de avance. pero para llegar al mismo debes tener una definición de prioridades, si es que quieres cumplirlo con tu marca personal.
Muchas veces hacemos tantas cosas que, terminan constituyendo un sinnúmero de acciones, no del todo bien hechas, y por ende los resultados no son los anhelados.
Por eso en un mundo multitarea como el que vivimos, es fundamental poder enfocarnos en lo realmente importante. Esto con el fin de dar la magnitud, relevancia y tiempos, a lo que realmente aporta; dejando de lado lo no vital. Esto te permitirá ser más competitivos, más asertivos, disminuir los niveles de estrés y frustración, permitiendo que, el camino que recorremos tenga menos sobresaltos. En este momento del proceso, te podría ayudar bastante un libro llamado “Enfócate” de Cal NewPort, en el cual te muestra las ventajas de hacerlo. Así mismo, te brinda ejemplos de grandes personalidades que han cambiado sus vidas y el mundo, al haber tomado la decisión correcta.
¿Cómo he podido aprenderlo y llegar a este nivel de definición?
Cuando escribo, dicto conferencias, publico en redes sociales, o genero actividad que tiene que ver con mi trabajo, siempre anhelo lo mismo. Le pido a Dios que me inspire para poder transmitir un mensaje que me ayude a tocar vidas de quienes me atienden. Llegar acá ha sido un largo camino por más que no lo parezca; y lo he conseguido en modo prueba – error. Primero, para saber cuál era mi propósito de vida, y luego para empezar a ejecutar todo un proyecto para llevarlo a buen término.
Esto lo vengo haciendo hace mucho tiempo, pero con un mayor énfasis y organización desde hace 15 años. Cuando empecé a saber qué quería hacer en mi vida, y me dediqué de lleno a conseguirlo. Con base en lo anterior quiero compartirte el día de hoy, las etapas que tuve que pasar y las creencias que tuve que romper. De igual forma, los avances que tuve que gestionar para ser hoy una marca personal constituida y con unas prioridades de vida definidas:
Primero de los puntos de conexión – Detuve la guerra contra el reloj:
Aunque soy consciente que en la vida para conseguir las metas y objetivos que anhelamos, es vital el manejo de los tiempos. Deje que quien midiera los mismos, fuera la pasión con lo que hago las cosas y no un simple reloj. El resultado fue la obtención de varias de las metas propuestas, en tiempos menores de los pensados. Simplemente, porque puse mi mirada en el camino que estaba recorriendo, y no en el minutero o segundero, de tan maravilloso invento.
Segundo punto entre mi marca personal y las prioridades de vida – Active el modo “Primero YO”:
Quise entrenarme y aprender un arte para ayudarme en la vida y después poder salir a ayudar a los demás. Dejé de oír los millones de voces del mundo, para centrarme en escuchar a mi voz interior. Asignándole 3 o 4 voces del entorno, que me podrían aconsejar a hacer cada vez mejor las cosas. En esta etapa fue fundamental el poder haber desarrollado mi herramienta de entrenamiento llamada MarketCoach. Definitivamente, este descubrimiento logro cambiar mi vida, y esto me permitió, brindar una alternativa para cambiar la vida de los demás.
Tercero – Arme mi plan de vida:
Lo escribí, lo revisé, lo volví a revisar, lo actualicé y hasta el día de hoy lo sigo haciendo. Definí que desearía ser un referente en mi campo laboral, alguien distinto e innovador, pero, antes que nada, me daría la oportunidad de ser feliz. Tener siempre esperanza y aceptarme tal y como era, con mis altas y mis bajas, pero que me centraría en las primeras.
Intentaría construir una familia, y junto con mi esposa, lucharíamos por hacer que esa felicidad fuera mutua, convirtiéndose en el proyecto de los dos.
Quite de las metas sin sentido, ni justificación de mi vida, como lo era el llegar a ser demasiado adinerado o tener un poder inmenso. Ya que desde ese momento descubrí que, ya no eran un fin, sino que serían un medio, un valor agregado al hacer lo que amo. En esta etapa aprendí que la vida te da lo que deseas en un porcentaje alto, si en realidad sabes a ciencia cierta, para que lo vas a utilizar.
Definir acá muy bien lo que deseas, hará que tu vida tenga un sentido o, todo lo contrario. Por eso el objetivo no debe ser tomado a la ligera y menos tratar de ser la copia del propósito de otra persona. Para que me entiendas más fácil te lo explico con el caso de alguien que conocí tiempo atrás. Siguiendo el ejemplo familiar, se propuso llegar a los 40 años con pre grado, maestría, un alto cargo directivo, esposa e hijos. Lo consiguió todo y poco después de cumplir los 40 años, se levantó un día, miró a su esposa y le pidió el divorcio porque no era feliz ¡Paradójico pero real!
Cuarto – Organicé mis actividades para conectar mi marca personal con las prioridades de vida:
Empecé a definir que era importante y que era urgente y le diseñé un plan de acción a cada una de ellas. Definí espacios para el trabajo, estudio, crecimiento personal, deporte, vacaciones, compartir con amigos, ocio, entre otros. Para tener una guía, pero sin que se volviese una camisa de fuerza, como te lo había mencionado en primero de los pasos.
Diseñé mi planeador de actividades diario, que es escrito a mano, en un cuaderno común y corriente. Con el fin de ir chequeando cada actividad, hacer seguimiento, y tener la satisfacción de darle el visto bueno, una vez termino cada pendiente.
Quinto – Dejé de pensar en la muerte para poder empezar a disfrutar de la vida:
Estos dos conceptos siempre van unidos y tienen la capacidad de alegrar o atormentar tu existencia, dependiendo de la forma que te lo tomes. Con base en lo anterior, quiero decirte que muchas veces desperdiciamos nuestro paso por la vida, pensando en que alguna vez vamos a morir. Esto nos impide realizarnos, explorar situaciones, buscar la felicidad y tener la realización que soñamos. En este orden de ideas, nos han vendido la muerte como una total tragedia y cómo un terror absoluto, basado en los fundamentos de la nada. En ese enfoque maquiavélico, no enquistaron la idea que, solo se vive una vez. Cuando realmente lo que pasa es que morimos tan solo una vez; vivir, lo hacemos una gran cantidad de ocasiones, de querer permitírnoslo.
No te voy a decir mentiras en estas líneas, haciendo la afirmación de sentir placer por morir. Eso sería ilógico, utópico y tonto; lo que sí quiero afirmar, es que el terror de pasado de solo escuchar la palabra, se ha ido. Trabajo a diario para seguir venciéndolo, y para permitirme el día que este cansado de caminar por este mundo, la oportunidad de ir a dimensiones desconocidas.
¿Te gustaría no tener temor a morir?
Ser inmortales podría ser hasta aburrido o un castigo, si lo analizamos detenidamente. Nos haría menos competitivos debido a que tenemos una eternidad para hacer las cosas, todo sería repetitivo y plano, y no sería tan emocionante vivir muchas circunstancias de la vida. entonces, demos gracias a la muerte por hacernos recordar constantemente que estamos vivos.
En este aspecto te recomiendo el libro de Simone De Beauvoir, llamado “Todos los hombres son mortales”. Con el fin de poder procesar muchas situaciones y problemas de pensar en una inmortalidad, es realmente una obra alucinante. Después de hacerlo, te aseguro que entenderás la importancia de darle realmente a tu marca personal las prioridades de vida que te mereces.
Marca personal y prioridades de vida ¡Las enseñanzas!
Una vez realizado lo anterior, supe que deseaba en mi vida, empecé a conseguirlo, y lo más importante; empecé a disfrutar de hacerlo. Obviamente, voy a seguir brindándole una constante evaluación, evolución e innovación, para que no deje de sorprenderme a diario.
Por ahora, mis prioridades se centrarán en ser cada vez más feliz, dar y recibir amor, generar esperanza con la bendición de Dios. Lo antes expuesto, de la mano de mi esposa, con la protección de mis padres, y con el consejo de los verdaderos amigos. Sintiéndome bendecido por hacer lo que amo, lo que me permitirá seguir tocando vidas y dejar un legado para cuando me vaya de este mundo. Y vos ¿Ya definiste con tu marca personal las prioridades de vida?
